Quinta Montes Molina - Mérida, Yucatán

Claudia De la cruz

Mi experiencia en este lugar fue agradable ? wooo es impresionante el poder entrar a una de estas casonas que se encuentran ubicados sobre el paseo de Montejo el poder admirar no solo desde afuera sino conocer un poco de como vivían en aquellos tiempos.

Es trasladarse en un viaje al tiempo. Todo se encuentra en buen estado, está todo sumamente cuidado y así debemos de seguirlo conservando para que más gente o visitantes tenga la oportunidad de conocerlo.

La parte de abajo que es donde está la cocina, la cava, el cuarto de lavado y los baños, me dieron un poco de escalofríos ya que como están abajo se siente como una vibra así. ? Igual y fue sugestión mia pero así fue.

Sin duda alguna volvería y si tienes la oportunidad de visitarla no la desaproveches.

También hay una tienda de souvenirs, yo compré unos libros informativos.

Mary Carmen Tello

Visitar este tipo de casas/Museo que sus propietarios actuales mantienen en perfecto estado haciendo honor a su historia familiar es digno de admirar y aplaudir. Leer en las fichas técnicas descripciones que expresan el valor moral de la familia donde se incluyen a todos los personajes que aquí habitaron y que fueron tratados con dignidad y respeto. Gracias por esta experiencia, no solo por los objetos maravillosos que permanecen hablando en silencio sino también por esos personajes que la habitaron y disfrutaron en su momento

Daniela Funes

La visita no fue guiada pero cada espacio cuenta con una descripción muy bien detallada, te lleva a imaginar lo que se vivió en aquel tiempo, al fondo del lugar se encuentra una cafetería muy linda en dónde puedes pasar un rato agradable después de tu recorrido.

José Manuel DN

Una Quinta o Casona de principios del siglo pasado que tienes que conocer.
En la entrada te dan una pequeña introducción sobre a quien o quienes perteneció la Quinta, a qué se dedicaban y otros datos interesantes.
La primera planta es de las habitaciones y comedor de la familia. Cada cuarto es único en estilo y decoración. Darse cuenta de la opulencia con la que vivían es algo impresionante. Todos los muebles, candelabros y algunas otras obras de arte fueron traídos desde todo Europa en los barcos que regresaban de traer el henequen.
Esta muy bien cuidada y en el sótano (donde vivía la servidumbre) encuentras muchas reliquias y fotos de cómo se vivía en esa época.
$120 el acceso que vale la pena si te interesa la historia y darte una idea de cómo vivían en esa época y sobre todo en el paseo Montejo.

Rodrigo Pinete

CASA MUSEO EN #MÉRIDA
Lujo y esplendor detenido en el Siglo XX de la historia de Yucatán
La Casa Museo Quinta Montes Molina se ubica en el corazón de Paseo de Montejo como un emblema de una época de esplendor en Mérida, Yucatán.

La Casa Museo conserva la belleza intacta de un estilo de vida que marcó irremediablemente el porvenir de la ciudad.

El final del siglo XIX y principios del XX, fue un tiempo de esplendor y prosperidad económica en Yucatán por la importancia del comercio mundial del henequén, que fue llamado aquí el “oro verde”. Muchos hacendados y comerciantes yucatecos amasaron fortunas y construyeron, en Mérida, palacios y hermosas mansiones en los estilos que estaban de moda en Europa. Esto se podía ver especialmente en la avenida #PaseoMontejo.

Uno de estos hombres prósperos fue Don Aurelio Portuondo y Barceló, originario de La Habana, Cuba. Fue enviado, desde EUA, a trabajar a Mérida; ahí conoce a doña Josefa de Regil Casares, perteneciente a una distinguida familia y se casa con ella, quedándose a vivir en la ciudad.

Debido a la difícil situación política que se vivió en México con la Revolución, don Aurelio, decide emigrar a Cuba con toda su familia en 1915. La casona fue comprada en 1919 por el señor Avelino Montes Linaje, otro dinámico y prominente hombre de negocios. Nacido en Laredo, España, en 1868. Al cumplir 13 años, fue enviado por sus papás a Mérida, a través de un conocido comerciante, que lo acomodó como empleado de una buena familia de la ciudad.

Trabaja con don Olegario Molina Solís, -futuro Gobernador de Yucatán-, se casa con su hija, María Molina Figueroa, con quien tiene 7 hijos.

En 1956 muere don Avelino -su esposa muere en 1932-, y deja La Quinta a su hija, Josefina Montes Molina (la tía Fina). Ella había sido siempre muy apegada a las costumbres de su papá y conservó la casa exactamente igual en cada uno de sus detalles. Josefina no se casó y, queriendo que la casa se quedara en la familia, al morir (en 1983) la heredó a su sobrina María Eugenia Molina Montes, la actual dueña.

La Quinta Montes Molina es un edificio de arquitectura ecléctica con tendencia neoclásica, representativa del período del Porfiriato en México y del auge henequenero en Yucatán. Como siempre ha sido una casa habitada, conserva muebles de las diferentes épocas por las que ha pasado, y podemos encontrar en ella muchos detalles que nos ayudan a entender mejor las costumbres de la alta sociedad de Mérida a principios del siglo XX.

Raúl bruno Reynoso

UNA CASA MUY ANTIGUA PERO MUY BIEN CONSERVADA Y ELEGANTE , LLENA DE OBJETOS DE LA EPOCA Y MUEBLES QUE EVOCAN TIEMPOS PASADOS , DIGNO LUGAR PARA DARSE UNA IDEA DE LA VIDA DE OPULENCIA QUE A COSTA DEL TRABAJO DE LOS INDIGENAS CAMPESINOS SE DABAN LOS HACENDADOS POR LA "FIEBRE DEL ORO VERDE" EL HENEQUEN

Albert Z Sosa

Una casona muy bonita y perfectamente conservada, es pequeña pero el recorrido vale la pena.
El personal muy amable con un recorrido muy interesante.

Arlin Luna

La casa cuenta una historia, el personal es muy amable. Es un recorrido que vale la pena.